La fumigación de chinches es uno de los servicios más requeridos en nuestra empresa, pues estos diminutos animalitos provocan verdaderos estragos en el hogar, y son causantes de un sinnúmero de enfermedades.
Las chinches adultas tienen alrededor de 5 milímetros de largo; antes de alimentarse, tienen una forma plana y ovalada, pero se vuelven más redondas y oscuras después de ingerir alimento. Salen de noche y sienten especial atracción por las zonas cálidas del cuerpo, así como por el dióxido de carbono que emanamos a través de la respiración; por lo general, se encuentran en habitaciones, pero se esconden también en grietas durante el día.
¿Tienen problemas de chinches? Entonces, este post es para ustedes. Sigan leyendo, porque hoy les contamos algunos datos interesantes acerca de esta plaga, que podrán ayudarles a prevenirla y combatirla.
- Viven de nosotros. Una de los aspectos que hace más peligroso a las chinches y que amerita control de plagas es precisamente el hecho de que se alimente de nosotros y sobreviva en los ambientes en los que somos más vulnerables, como nuestras camas. Por lo general, se esconden en las habitaciones durante el día, pero, con la puesta del sol, invaden nuestras camas. Sus refugios más comunes son las costuras de los colchones, en el armazón de la cama, detrás de los muebles, especialmente en el cabecero; o donde la pared se une con el suelo.
- Signos de presencia de chinches. Los primeros síntomas se manifiestan con picaduras, que se producen en las camas. Estas mordeduras son erupciones de diferentes tamaños que generan escozor. Muchos médicos no logran identificarlas inmediatamente, sino que recurren a distintos análisis para determinar su causa. Si sienten picor después de despertar, es muy probable que estén sufriendo una infestación de chinches en sus colchones.
- Difícil control. El principal motivo para contratar a expertos en fumigaciones es porque las chinches son plagas difíciles de controlar. Pueden pasar desapercibidas durante semanas, haciendo más difícil su erradicación. A menudo se emplean aerosoles; sin embargo, cuando el problema es mucho peor, se recurre a tratamientos químicos para atacar cada uno de sus focos y acabar con la eclosión de los huevos de estos insectos. También puede llegar a requerirse una eliminación mecánica de los huevos, lo que incluye congelar o hervir los objetos afectados.
En Fumicam somos especialistas en control de plagas. Contamos con una amplia experiencia que nos respalda y con el apoyo de nuestros clientes. Para mayor información, los invitamos cordialmente a que visiten nuestro sitio web.
